Finalizó la participación del equipo argentino de esgrima adaptada en la Copa del Mundo, que se llevó a cabo en París, Francia. Alejandro Palavecino y Jorge Michiardi fueron los representantes nacionales en espada y florete.
Luis Alarcón fue la baja de último minuto. Por orden médica no pudo viajar: lo revisaron antes de partir y su lesión en el pie tenía una infección, por lo que corría peligro. Por ese motivo, y al no llegar a tres participantes, Argentina no pudo competir en Equipos.
En Individuales A, Michiardi no pudo pasar la ronda de octavos de final en ninguna de las dos armas. Tampoco pudo hacerlo Palavecino en la categoría B, quien quedó 25º en florete y 26º en espada.
«Me tocó una zona muy complicada. Pero me vine conforme porque me he enfrentado con atletas muy superiores y no fue paliza. En otros momentos me ha pasado pero ahora cambió, no estoy muy lejos de los mejores. Con un poco más de entrenamiento, técnica y roce internacional, puedo crecer más», le dijo Palavecino a paradeportes.com, ya de regreso en Argentina.
«Analizando videos y trabajando seguimos aprendiendo. Hay que mejorar y mejorar hasta llegar al punto exacto para llegar al regional». Para eso se prepara ahora el equipo: en mayo de 2016 se realiza el Regnional Americano en Brasil, con las últimas plazas disponibles para los Juegos Paralímpicos de Río.
Antes, toca el cierre de fin de año: el PreRegional en el CENARD, con competidores de Chile, Uruguay, Brasil, Canadá y Estados Unidos, el 14 y 15 de noviembre. El 2016 comenzará en febrero con la Copa del Mundo en Hungría y luego en abril habrá otra en Canadá. Pero la mira estará puesta en el Regional de mayo.
«Estamos apuntando todos los cañones hacia mayo. A nivel internacional hemos mejorado, pero los otros países también lo hicieron. Igual me tengo confianza, es a matar o morir. La última chance de estar en Río. La idea es entrenar y llegar bien físicamente para lograr el resultado positivo. Y sino, dejar todo en la pista», cerró Palavecino.
