La imagen se repite una y otra vez. Diana Valentini se sube al podio, saluda a su familia, a sus compañeros argentinos y no aguanta la emoción. Se tapa el rostro y llora. La nadadora argentina ya ganó la medalla plateada en los 50 metros espalda y espera la coronación en el Mundial de Natación para Sordos Buenos Aires 2023.
Cuando Juan Daniel Lopez Maccio, presidente de la Confederación Argentina Deportiva para Sordos (CADES), saluda y le cuelga la medalla a Valentini se escucha la mayor ovación del torneo. Esa es, sin dudas, la imagen del Mundial.
“Estoy cumpliendo un sueño, ganar una medalla en mi casa y frente a mi gente es algo que nunca me voy a olvidar. Estoy tocando el cielo con las manos”, dijo la argentina que sumó su tercera medalla mundialista.
Para Valentini, la clave fue el trabajo mental: “Hay que estar tranquila. A veces el cuerpo se cansa antes de competir y la cabeza debe estar en positivo. A eso hay que sumarle la presión de ser local, que es complicado. Traté de no pensar en el resultado, me propuse disfrutar la competencia”, agregó.
“Quiero dedicarle este triunfo a mi hijo Tomás, a mi mamá, Susana, que siempre me apoyó. A mis amigos y amigas que me acompañaron, a mis compañeros del equipo argentino, a mis entrenadores: Marcela Belviso, Marcos Bertone y Cristian Rosenhoffer, a mi equipo del Quilmes Athletic Club y a todos los argentinos”.
Valentini consiguió la plateada con un tiempo de 1.10.71. La estadounidense Brooke Elizabeth Thompson ganó la dorada con un registro de 1.09.42, mientras que la japonesa Ikua Nakahigashi completó el podio con 1.11.39