Cuenta las horas, que se hacen eternas, imagina momentos, que serán imborrables y sueña triunfos, que serán históricos. El seleccionado femenino de goalball se prepara para debutar en un Mundial. Será el 7 de diciembre en Portugal, donde Argentina compartirá el Grupo A con Canadá, Turquía, Corea, Argelia, Dinamarca, Canadá, Francia y México.
Irina Versele, la entrenadora de Las Topas, es la encargada de calmar la ansiedad de sus jugadoras. “Estamos felices y con mucha expectativa. Viajamos con una valija cargada de ilusiones. Con energía positiva para poder cumplir un sueño por el que venimos trabajando desde hace mucho tiempo. Participar en una Copa del Mundo nos obliga a que le mostremos al mundo nuestros progresos”, indicó la DT.
“Queremos probarnos y ver cómo estamos. Nos vamos a enfrentar a muchos seleccionados que son potencia por su juego y por sus estructuras. Nosotros tenemos que aprender y sacarle el jugo a esta experiencia”, dijo Versele. “Vamos a dar lo mejor y nuestro objetivo es regresar al país con muchas enseñanzas técnicas y tácticas. Es un Mundial donde todos los equipos, salvo México, están por encima nuestro en el ranking”, agregó.
Estudiar a los rivales fue una de las tareas del cuerpo técnico en la previa del Mundial. “La tecnología te ayuda, pero no te soluciona nada. Podemos ver los sistemas de juegos de los equipos, la contextura física de las jugadoras y ver cómo hacen los lanzamientos. Eso es muy valioso. Pero es solamente un parte. En la cancha es otra cosa y para eso nos preparamos”, explicó Versele.
Argentina viajará a Portugal con las siguientes jugadoras: Lorena Magaña (Neuquén), Mariela Almada, Soledad Almada y Mailén Benítez (Buenos Aires), Romina Cardozo (Mendoza) y Milagros Soria Porretta (Córdoba).
