El miércoles, la organización del Abierto de Estados Unidos informó que este año no se desarollarán los torneos de tenis adaptado, juniors, dobles mixto y tampoco habrá qualy. Por la pandemia, el certamen debió realizar varios cambios y los informó esta semana. Pero los top ten del ranking mundial de la disciplina sobre silla de ruedas mostraron su enojo por la decisión.
Gustavo Fernández, representante argentino y número 2 del mundo, manifestó su «decepción» a través de las redes sociales, donde todos los jugadores hicieron su descargo. La iniciativa contó con el apoyo del británico Andy Murray, quien compartió las palabras del australiano Dylan Alcott, número uno en la categoría quad.
Pero este viernes hubo un avance importante: la Asociación de Tenis de los Estados Unidos (USTA) armó una charla con los jugadores en la que pidió disculpas por no haber comunicado la decisión con tiempo. Y se fijó una fecha de votación para este lunes, para definir cómo seguirá el tema: los jugadores votarán cómo se resuelve la situación, entre tres opciones.
Las posibilidades son: suspender el torneo adaptado y que USTA les pague una compensación económica a los jugadores; jugarlo en la misma fecha y lugar pero con una reducción de los premios; o postergarlo para octubre y llevarlo a cabo en Orlando, no en Nueva York.
«Tuvimos reunión el grupo de jugadores con US Open e ITF con respecto a lo de ayer. Reunión muy positiva y creo que, en definitiva, es un avance muy grande para nuestro deporte. Se nos puso en el mapa y se nos dio la voz que estábamos buscando», informó Gustavo Fernández. «Acordamos que la participación del circuito de silla en US Open se someta a votación de los jugadores, la cual se hará el próximo lunes, para luego ver de que manera se prosigue. Gracias a todos por el apoyo, y por ayudarnos a hacernos escuchar. Hoy se dio un paso para adelante», cerró el cordobés.